La terapia visual, entrenamiento visual o rehabilitación visual es un tratamiento optométrico, totalmente individualizado, que tiene como objetivo potenciar y corregir los problemas del sistema visual: enfoque, coordinación de ejes visuales, ojo vago, estrabismos o problemas de aprendizaje relacionados con la visión.
El optometrista prepara un programa personalizado de ejercicios orientados a desarrollar e incrementar al máximo las habilidades visuales y la integración de éstas con el resto de los sentidos. Gracias a la repetición de estos ejercicios y al aumento de su demanda se logra la automaticidad del sistema visual, es decir, se crean nuevas conexiones neurológicas.
La terapia visual es efectiva para pacientes de todas las edades. Es necesario dedicarle el tiempo, la constancia y el esfuerzo necesario para poder conseguir la mejora deseada. En el caso de los niños, también, es necesaria la colaboración de los padres.
Un programa de terapia visual consta de:
- Terapia en consulta: normalmente se trabaja por espacio de 10 ó mas minutos durante días seguidos. Por ejemplo con el M.I.T. con una serie de ejercicios específicos.
- Terapia en casa: se trabaja cada día durante unos 20 min. aproximadamente.
La duración de un programa de terapia visual puede variar de 20 a 40 sesiones en función del problema y de los objetivos a conseguir. A lo largo del programa se realizarán evaluaciones para ir valorando la evolución del paciente. En terapia visual trabajamos problemas como:
- acomodación
- oculomotricidad
- binocularidad
- percepción
- pensamiento matemático
- integración visuo-motora
- lateralidad
- direccionalidad